Encuentran en la antigua ciudad de Paneas un tesoro de monedas bizantinas escondidas ante el avance de la conquista musulmana


Una excavación de la Autoridad de Antigüedades de Israel encontró 44 monedas de oro bizantinas en el yacimiento de la antigua ciudad de Paneas (posteriormente conocido como Banias), dentro de la Reserva Natural del Arroyo Hermón.

El tesoro de monedas escondido es la prueba de un momento dramático de la historia de la zona: la conquista musulmana del Imperio Bizantino en el Levante.

Banias, ahora Parque Nacional, es un yacimiento arqueológico que se asentó en torno a un gran manantial en varias épocas, primero establecido por los cananeos, que dedicaron un santuario al dios Baal.


En el periodo helenístico, Banias sirvió como lugar de culto al dios Pan (de ahí el nombre griego original del lugar). El asentamiento alcanzó su máximo esplendor en el periodo romano temprano, cuando Herodes el Grande y su hijo Filipo II reconstruyeron por completo la ciudad y la llamaron Cesarea de Filipo, en honor al emperador romano Augusto.

Según la tradición cristiana, Banias se hizo famosa por ser el lugar donde el apóstol Pedro proclamó a Jesús como el Cristo, y Jesús le dio a Pedro las llaves del reino de los cielos. En la época bizantina, se construyó una iglesia junto al manantial.
En 1129, los cruzados emprendieron la fortificación de la ciudad para convertirla en una base militar desde la que atacar y conquistar Damasco, pero esto duró poco, ya que los musulmanes conquistaron la ciudad en 1132.


La Dra. Gabriela Bijovsky, experta en numismática de la Autoridad de Antigüedades de Israel, examinó el tesoro de monedas, compuesto en su totalidad por monedas de oro (solidus), e identificó algunas monedas del emperador Focas (602-610 d.C.) y muchas acuñadas por el emperador Heraclio (610-641 d.C.).

Las últimas monedas de Heraclio sitúan el conjunto de monedas en la época de la conquista musulmana de la Palestina bizantina en el año 635 de la era cristiana.

Según Eli Escusido, director de la Autoridad de Antigüedades de Israel: "el tesoro de monedas es un hallazgo arqueológico extremadamente significativo, ya que data de un importante período de transición en la historia de la ciudad de Banias y de toda la región de Levante. La Autoridad de Antigüedades de Israel, junto con la Autoridad de Parques Nacionales, trabajará conjuntamente para exponer el tesoro al público."









Fuente: Israel Antiquities Authority

Carlos III ya tiene moneda con su cara: la de 50 peniques



Nuevo rey, nuevas monedas y nuevos emblemas. Este viernes, la Real Casa de la Moneda británica ha revelado cómo será la futura moneda del Reino Unido en homenaje al nuevo rey. Eso sí, actualmente hay más de 29.000 millones de monedas circulando con la efigie de la reina, así que el cambio de unas por otras va a ser un proceso de meses (e incluso años).

El retrato de Carlos III, que aparecerá en las monedas de 50 peniques, se empezará a distribuir gradualmente a partir del próximo mes de diciembre. El nuevo diseño es obra del escultor Martin Jennings y en él se muestra al rey mirando hacia la izquierda, al contrario de como aparecía la reina Isabel II en las monedas, siguiendo la tradición impuesta por Carlos II en la que cada monarca debía mirar en dirección contraria a su predecesor.

“Es la obra más pequeña que he creado, pero es una lección de humildad saber que será vista y sostenida por personas de todo el mundo durante los siglos venideros”, explicó su creador. 

En la efigie oficial, el monarca no lleva corona y aparece rodeado de una inscripción en latín que se traduce como: “Rey Carlos III, por la gracia de Dios, defensor de la fe”. Ha sido el propio rey el que ha dado el visto bueno al retrato antes de ser presentado. A partir de 2023, se acuñarán más monedas: desde un penique hasta dos libras.

Esta incorporación circulará junto a las monedas ya existentes con el retrato de la reina Isabel II durante los próximos años, aunque las de la monarca se irán retirando gradualmente. La Real Casa de la Moneda lleva produciendo las monedas para el Reino Unido desde hace más de 1.100 años, entre las que se incluyen las de los 70 años del reinado de Isabel II. 

A su vez, a partir del 3 de octubre se lanzará un juego de monedas conmemorativas del reinado, vida y legado de Isabel II. Las monedas de cinco libras se acuñarán con dos retratos: uno de sus primeros años en el reinado y el segundo, durante sus últimos años.

Moneda de cinco libras que conmemora
 70 años de reinado de Isabel II 

Con la muerte de Isabel II, no solo se ha tenido que cambiar el retrato en las monedas o el God Save The Queen por el God Save The King, también se ha tenido que diseñar un nuevo emblema real. El pasado martes, una vez finalizado el luto oficial, se presentó el nuevo sello real de Carlos. Este podrá visualizarse en cuanto se haga el cambio en diferentes lugares como los buzones de correos, sellos, edificios gubernamentales, uniformes de gala de los militares o en el personal que trabaja para el rey. El emblema consta de una gran ‘C’ de Carlos (Carolus en latín), entrelazada con una ‘R’ de rey (Rex en Latín) y acompañado de un ‘III’ en el interior de la unión. También se puede ver una corona en la parte de arriba, símbolo que no aparece en las nuevas monedas.

Poco a poco, la imagen de Isabel II irá desapareciendo y en su lugar, aunque costará un tiempo, se dejará ver los nuevos diseños en honor a un rey ya proclamado, pero aún no coronado.

Nuevo emblema de Carlos III que sustituirá el que ha protagonizado los 70 años de reinado de Isabel II.
Nuevo emblema de Carlos III 












Fuente: elpais.com

Así es la exclusiva moneda de 40 euros que se lanzará en España este otoño


La Fábrica Nacional de Moneda y Timbre trabaja en la fabricación de una moneda especial que tendrá un valor de 40 euros. Desde la introducción del euro, la Unión Europea permite a los países que tienen en curso esta moneda, diseñar tiradas especiales tanto de monedas como de billetes para fechas señaladas o conmemorar hechos históricos.

Es lo que se va a hacer en España con esta nueva moneda que multiplicará por 20 el valor de la moneda habitual con valor más alto (2 euros). Se trata de una edición especial con un valor de 40 euros, de la que se van a fabricar en torno a un millón de unidades. Esta nueva pieza conmemora la primera vuelta al mundo de Magallanes-Elcano, de la que se cumple el V Centenario. Está confeccionada de plata 925 y mide 33 milímetros de diámetro, con un peso de 18 gramos.


En el diseño aparecerá la nave Victoria a bordo de la cuál Juan Sebastián Elcano completó la primera navegación completa alrededor de la tierra. La embarcación se sobrepone a un mapamundi del cartógrafo italiano Battista Agnese que está en los archivos de la Biblioteca Nacional. En la parte superior se pueden leer 'V Centenario Vuelta al Mundo' y '40 euro'.


 En el reverso están dibujados los perfiles de Sus Majestades los Reyes con la inscripción en la parte superior 'Felipe VI y Letizia' y 'España 2022' en la inferior. Esta peculiar moneda se podrá adquirir en las sucursales bancarias a partir del próximo mes de octubre o noviembre.











Cientos de monedas de diversas épocas encontradas en Egipto



Un equipo de arqueólogos egipcios ha descubierto, en la localidad egipcia de Esna, un fabuloso tesoro de monedas pertenecientes a diversas épocas, desde el califato fatimí hasta la era otomana. También han encontrado moldes y pesos, lo que les hace pensar que aquí se encontraba una casa de moneda. El sitio del descubrimiento se encuentra ubicado justo detrás del Templo de Jnum, un importante lugar turístico construido en el siglo II a.C.

El examen ha permitido identificar, hasta ahora: monedas de oro de la época fatimí (siglos X a XII), monedas de plata de época mameluca (siglos XIII a XVI) y monedas de bronce y cobre de época otomana (siglos XVI a XIX). También se han encontrado algunas con la imagen del rey León II de Armenia, que gobernó a finales del siglo XIII. Las más abundantes son las de la era mameluca, que suman alrededor de 300 piezas.

El equipo forma parte de una misión del Consejo Supremo de Arqueología, organismo dependiente del Ministerio de Turismo y Antigüedades, que ha anunciado el descubrimiento a través de su secretario general Mostafa Waziri. La importancia no radica solo en el gran número de monedas encontradas, sino sobre todo en su variedad y en el hecho de haber sido halladas en un solo sitio. El equipo sigue trabajando en el sitio del descubrimiento para intentar averiguar si realmente se trataba de una casa de moneda.






Fuente: nationalgeographic.com.es

La extraña tradición de las monedas: Carlos III mirará en la dirección opuesta a Isabel II



Ya se ha activado la Operación Puente de Londres, un procedimiento que se va a alargar durante varias semanas y en el que se van a ver implicados desde instituciones a medios de comunicación. Por supuesto, esto afectará a la economía, sobre todo si se declara bank holiday el día del funeral de la reina Isabel II. Pero es una economía que va a cambiar radicalmente. Y eso así porque lo va a hacer de forma física: el rostro de Carlos III de Inglaterra será el que aparezca en monedas y billetes. Y lo hará opuesto a su madre.

No solo el himno nacional británico pasa de "God Save the Queen" a "God Save the King", sino que toda la numismática de varios países se van a ver afectadas por el fallecimiento de Isabel II este jueves 8 de septiembre a los 96 años en el Castillo de Balmoral. Comenzando, claro, por la libra esterlina, cuyas monedas han de seguir una tradición que, casualmente, se inició con el reinado de Carlos II, el cual comenzó en 1649 y finalizó en 1685.

El monarca necesitaba demostrar, después de volver al poder, que tenía autoridad real, de ahí que una clara ruptura con el gobierno de Oliver Cromwell, al que metafóricamente daba la espalda mirando hacia su derecha en las nuevas monedas acuñadas, para las cuales se ideó una competición concursal de grabadores de la época.

Y es que, desde entonces, la dirección en la que mira la cabeza del rey o la reina en las monedas ha cambiado con cada monarca sucesivo. Esta alternancia solo la rompió Eduardo VIII, quien insistió en que su imagen mirara hacia la izquierda.

Se desconoce si esta decisión fue tomada por rebelión contra las normas establecidas, ya que era notorio su malestar por no poder casarse con Wallis Simpson, o por vanidad, dado que lo consideraba su mejor perfil. Pero lo cierto y verdad es que abdicó antes de ser coronado -dedicándose, entre otras cosas, a asistir a casi todas las fiestas filonazis que se celebraban en Reino Unido e incluso codeándose con Adolf Hitler- y solo se produjeron algunas piezas experimentales.

No obstante, se determinó que los diseños para la acuñación de su sucesor, su hermano Jorge VI, padre de Isabel II, debían hacerse atendiendo a la idea de que las de Eduardo VIII no habían entrado en ciruclación y que de haberlo hecho estas lo hubiesen representado mirando hacia la derecha, restableciendo así la tradición original.


Es por ello que Jorge VI miraba hacia la izquierda; en las monedas con el rostro de Isabel II esta ha aparecido siempre mirando a la derecha; y este es el motivo por el que aquellas que se acuñarán con el perfil de Carlos III le mostrarán mirando a la izquierda, siguiendo la tradición. Si bien, en teoría, esto no comenzará hasta después de su coronación, dentro de un año.

Es importante resaltar, además, que esta es una costumbre que no se aplica a la filatelia, pues en los sellos británicos los monarcas siempre aparecen mirando a la izquierda.

¿Qué hacer con todas las monedas y billetes actuales?

Este es uno de los grandes problemas a los que se enfrenta ahora Reino Unido y parte de la Commonwealth con el perfil en sus monedas y billetes de una monarca que ha reinado más de 70 años y que han de cambiar por la de su sucesor en el trono. Aunque es cierto que Isabel II se convirtió en reina en 1952, no fue hasta 1960 cuando su rostro empezó a aparecer en los billetes de una libra, en un ya famoso diseño de Robert Austin.

Medios como The Guardian estiman que hay alrededor 4.500 millones de monedas y billetes con la cara de la fallecida reina, y que se va a tardar algo más de dos años en poder reemplazarlo todo por el rostro del nuevo soberano, Carlos III de Inglaterra, mientras se van retirando de circulación los anteriores, algo que además deberá acordarse antes con Buckingham Palace para que se haga cargo del nuevo diseño y parte de la logística.

Todo un trajín que afectará además al diseño de nuevos sellos, al propio pasaporte y hasta a los uniformes de la policía y del ejército. Y eso solo en suelo británico: la cabeza de Isabel también aparece en otros países de la Mancomunidad de Naciones, como en los billetes de 20 dólares en Canadá, en las monedas y los billetes de 5 dólares neozelandeses y en todas las monedas y billetes emitidos por el banco central del Caribe Oriental, amén de que ya hay países que están planteándose ser una república, lo que ahondaría en el problema numismático.










Deciden hacer obras en su cocina y descubren más de 200 monedas de oro bajo el suelo


Imagínese que llega el verano, que le apetece hacer un cambio en su casa y se deciden a reformar la cocina. Momentos de ilusión y de pereza a partes iguales. Ruido, desorden, suciedad. 


Llega el momento de levantar el suelo y cuando los obreros están en plena faena, con pico y pala en mano, levantando arena de su vivienda unifamiliar, aparece un tarro del tamaño de una lata de Coca-Cola llena de monedas de oro. Esta historia que podría formar parte perfectamente de cualquier sueño de verano ha sido la que acaba de vivir un matrimonio británico en el pueblo de Ellerby, North Yorkshire, cuya vivienda del siglo XVIII había sido ocupada previamente por una familia de comerciantes rica e influyente, los Fernley-Maisters importadores y exportadores de mineral de hierro, madera y carbón y miembros del parlamento en aquella época.


Al abrir el bote se dieron cuenta de que lo que brillaba tanto no era cableado eléctrico como pensaban en un primer momento, sino un espectacular tesoro de 264 monedas de oro valorado en 250.000 libras esterlinas (casi 300.000 euros), una vez analizadas por un experto y puestas a disposición de los coleccionistas para el próximo otoño por parte de los subastadores londinenses Spink & Son.


Entre los hallazgos más importantes de la colección se encuentra una guinea (moneda de oro que se utilizó en el Reino Unido, antes de que adoptase el sistema decimal en 1971) de Jorge I de 1720, que tiene un error de acuñación (la moneda no tiene la cabeza del rey, en lugar de tener dos lados de la moneda), por lo que se espera que alcance un precio de 4.000 libras esterlinas, y otras guinea de Carlos II de 1675, que tiene un error de ortografía (con el nombre en latín del rey escrito incorrectamente como CRAOLVS en lugar de CAROLVS) por la que se puede llegar a sacar 1.500 libras esterlinas.


Las monedas datan de 1610 a 1727, que suele ser un período largo para un tesoro, por lo que se considera que la familia Fernley-Maisters estuvo guardando esas monedas durante varias generaciones hasta que el bote de las monedas fue escondido en algún momento bajo el suelo hasta el descubrimiento totalmente fortuito por parte de este matrimonio, que, a diferencia de muchos cazadores de tesoros, que se afanan en buscar en los lugares más recónditos posibles, nunca han usado un detector de metales ni nada similar.






¿Cuál es la moneda más cara de la historia de España que vale 2 millones de euros?

Si hablamos de las monedas y billetes más codiciados por los coleccionistas y los amantes de la numismática estos suelen ser artículos con muchos años de antigüedad y de los que hay muy pocos ejemplares en todo el mundo. Hasta el punto de que en ocasiones se llegan a pagar cantidades superiores al millón de euros por algunas monedas especiales.

Réplica en plata del centén de 1609. / Efe

Una de ellas es el centén de Felipe III, una moneda de 100 escudos de oro que comenzó a emitirse en 1609 y que es la más cara de la historia de España. Así lo confirma el portal especializado 'coleccionistasdemonedas', que detalla como este centén es la moneda antigua española más cara de la historia.

Según explican en el portal de numismática, se trata de una moneda de gran tamaño con «una ingente cantidad de oro», en torno a los 340 gramos. Se acuñó durante los reinados de Felipe III y Felipe IV, cerca del siglo XVII, en Segovia, un ejemplar único que desde hace siglos no está en circulación. Los centenes de Felipe IV no son consideradas piezas únicas, a diferencia del centén de Felipe III, por lo que su valor no es tan elevado.

La venta de esta moneda que la catapultó al número 1 de monedas más valiosas de la historia de España tuvo lugar en una subasta realizada en el año 2009. Fue entonces cuando un comprador llegó a ofrecer una cifra cerca al millón de euros para hacerse con ella. Una cantidad muy alta que, sin embargo, se sitúa por debajo del valor que le otorgan hoy en día los expertos a este centén.

Según 'coleccionistasdemonedas' y otros portales como 'blognumismatico', el valor actual de la moneda podría ser del doble del precio por el que fue vendida: 2.000.000 euros. Una cantidad que supera, y por mucho, el valor de la segunda moneda más valiosa de España, la de 20 excelentes de los Reyes Católicos, que cuenta con un precio de 600.000 euros para los ejemplares que estén excelentemente conservados.





Spintria: la controvertida moneda sexual que usaban los romanos



En la Antigua Roma, las relaciones extramatrimoniales con profesionales del sexo eran un hábito extendido porque la mayoría de los compromisos se realizaban por intereses que poco tenían que ver con el amor o elegir a la persona deseada.

Además, cronistas como Catón, describieron el hecho de recurrir a la prostitución como una válvula de escape para "sanear" las relaciones ya que consumando el deseo sexual en burdeles o prostíbulos, los hombres evitaban sentir la tentación por las mujeres de otros.


Para llevar a cabo estas polémicas transacciones carnales de dudosa moral, se usaba una moneda llamada spintria. Estaban hechas en bronce o latón y tenían unos 20 milímetros de diámetro aunque todavía hay diferencias sobre cómo se usaban.

Por un lado, para algunos expertos y algunas expertas, eran monedas que los romanos utilizaban para pagar a las prostitutas por adelantado. En ellas, se veía por una cara una cantidad y por la otra una escena sexual. Por otro, historiadores e historiadoras aseguran que estas fichas las utilizaban los proxenetas para cobrar los servicios por adelantado.


Otra teoría que se baraja es que en aquella época, esta moneda circulaba por los burdeles y servía para que las prostitutas que no sabían latín entendieran el servicio que el cliente quería recibir.

Aunque hay diversidad de opiniones, la mayoría de fuentes coinciden en que no era una moneda con la que se pagada los servicios ya que las cantidades que marcaban, en la mayoría de ocasiones, no coincidían con lo que normalmente cobraba una profesional del sexo en la Antigua Roma.

Además, también se coincide en que jamás se ha encontrado ninguna de estas monedas en los burdeles que se han excavado hasta la fecha, poniendo en cuestión que la spintria fuera una moneda con la que pagar servicios.

En conclusión, se cree que la teoría que cobra más sentido es que esta ficha se utilizada en privado en los burdeles entre los chulos y los clientes romanos como un código de comunicación que atendía a una práctica que sigue levantando ampollas varios siglos después.







Fuente: culturainquieta.com

Una rara moneda de bronce de 1.850 años, que representa a la diosa lunar romana Luna, fue descubierta en la costa de Israel


La pieza con el retrato de la diosa Luna sobre el signo zodiacal de Cáncer en un lado y la cabeza del emperador romano Antonino Pío en el otro, fue hallada frente a la ciudad costera de Haifa, al norte del país.

“Se trata de la primera vez que se encuentra una pieza de este tipo en la costa de Israel”, indicó Jacob Sharvit, director del departamento de arqueología marina de la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA), en un comunicado.

Se hallaba en un “pequeño botín” con otras piezas. Las circunstancias del descubrimiento indicarían que hubo un naufragio cerca.

Estas piezas han sido extremadamente bien conservadas. Algunas son realmente muy raras y su hallazgo completa partes del rompecabezas histórico del pasado del país.

La moneda de la diosa romana fue acuñada bajo el mandato de Antoninus Pius (138-161 d. C.) en Alejandría, Egipto.

Además, la pieza lleva la inscripción “año ocho”, correspondiente al octavo año del reinado del emperador, marcando el apogeo de la “Pax Romana”, un período de relativa calma en el Imperio Romano.




La moneda única en todo el mundo



En Aragón se acuñó muchos siglos atrás y, según los especialistas, la moneda más antigua que se conoce. Fue realizada en torno al año 179 antes de Cristo en la ciudad ibérica de Celse (Celsa, Zaragoza). En esa época, y posteriormente, durante la ocupación romana, hubo numerosas acuñaciones, algunas más conocidas que otras.

Para los coleccionistas aragoneses tiene un especial valor el llamado ‘dinero jaqués’ o ‘dinero aragonés’, un tipo de moneda de vellón emitida en el Reino de Aragón desde la segunda mitad del siglo XI hasta 1728. La más antigua se remonta al reinado de Sancho Ramírez (1063-1094) y se acuñó en Jaca.

Algunas de estas monedas, por su rareza, alcanzan altos precios en las subastas especializadas. Pero la protagonista de este artículo superaría a todas si saliera a la venta porque está acuñada en oro de gran pureza y porque solo se conoce un ejemplar en todo el mundo, que se conserva entre los fondos de la Biblioteca Nacional de Francia: los cien ducados de oro de Juana I y Carlos I. Alguna web se ha atrevido a valorarla y la ha tasado en 900.000 euros.

Anverso y reverso de los cien ducados de oro de Juana I y Carlos I, conservados en París.

Se acuñó en oro en la Casa de la Moneda de Aragón, que se hallaba en la capital de Reino, Zaragoza, en 1528. En el anverso están representados Juana I y Carlos I de Aragón, en busto y de perfil, cara a cara y coronados. A su alrededor, en latín, figura la leyenda: «Juana y Carlos, Reyes de los aragoneses, triunfadores y católicos); y, en el reverso, está representado el escudo con el Señal Real de Aragón y la inscripción "Aragonum". En el perímetro, la leyenda dice: «Juana y Carlos, su hijo primogénito, reyes por la gracia de Dios» y aparece el escudo con el Señal Real de Aragón y la inscripción "Aragonum".

Según la mayoría de los especialistas, se acuñó por un motivo excepcional como regalo para conmemorar el juramento de Carlos I (V del Sacro Imperio) como rey de Aragón. En realidad, era más bien una especie de medalla.
 
Su existencia pasó inadvertida hasta que se descubrió, ya bien entrado el siglo XVII, en una pintura del holandés Jacques de Ghein II, que al parecer la copió en 1603.

Un regalo para la boda real

Se puede recordar que una reproducción de esta moneda fue el regalo que Aragón entregó a don Felipe y doña Letizia con motivo de su boda el 22 de mayo de 2004. Eso sí, en el canto de la moneda figuraba escrito "Philippus*Aragón*Laetitia*MMIIII". Y, en la placa de plata que la acompañaba, "A Sus Altezas Reales, Don Felipe y Doña Letizia, Príncipes de Gerona. Los aragoneses, con ocasión de sus nupcias, tienen el alto honor de obsequiarles con una réplica de la moneda de cien ducados de oro, portadora de las efigies de sus antepasados, los Reyes Juana I y Carlos I de Aragón, y de su escudo de armas acuñada el año 1528 en la ceca de Zaragoza". La reproducción de la moneda se hizo en la platería de Pedro Faci.