La RCM-FNMT ha puesto este año a la venta, una moneda conmemorativa en plata, de 10 euros de facial y en emisión limitada, para celebrar este hecho histórico. El reverso de las monedas presenta como tipo principal el retrato del fundador del cuerpo, el II Duque de Ahumada junto con los emblemas de la Guardia Civil.
Para seguir con la tradición española en este tipo de piezas, la nueva moneda se ajusta a la métrica de los antiguos 8 reales, de modo que cada una de los ejemplares que componen la emisión tiene un peso de 27 gramos, con un módulo de 40 milímetros.
Duque de Ahumada, Francisco Javier Girón y Ezpeleta de las Casas Enrile
El volumen de acuñación de esta emisión se ha fijado en 7.500 unidades, todas ellas en calidad proof, con el canto estriado. Los coleccionistas interesados ya pueden adquirirlas en la tiende de la RCM-FNMT.
En el anverso aparece el retrato del rey Felipe VI en uniforme de Capitán General, rodeado por la leyenda con su nombre y con el año de emisión 2019.
Hubo algunas intentonas de crear un Cuerpo permanente militar, como la “Legión de Salvaguardias Nacionales», “Celadores Reales” y “Salvaguardias Reales”, así hasta que llegó el Decreto de 28 de marzo de 1844, del Ministerio de la Gobernación, con González Bravo en el poder, que señalaba una plantilla de 14.333 hombres, si bien no llegó a entrar en vigor por tener defectos considerables.
La subida del General Narváez al poder el mes siguiente, y la consiguiente destitución de González Bravo, favoreció de manera resolutiva el nacimiento de la Guardia Civil. Es encargado de la organización del Cuerpo el segundo duque de Ahumada quien, cinco días más tarde, envía a Narváez sus famosas «Bases necesarias para que un General pueda encargarse de la formación de la Guardia Civil«, que serían el origen del Decreto del Ministerio de la Guerra, de 13 de mayo del mismo año, con el que realmente se puso en marcha el Instituto, fijando una plantilla de 6.015 hombres, para suplir en las labores de seguridad del reino al Ejército, a las Compañías Provinciales y a la Milicia Nacional.
Se requerían una serie de condiciones para acceder a la Guardia Civil de aquella época: Haber servido 5 años en el Ejército; saber leer y escribir (el 75% de la población era analfabeta); haber obtenido un licenciamiento correcto del Ejército; buena conducta y certificado de salud y robustez; comprometerse por 8 años, con posibilidad de reenganche y premios en metálico; y proveerse por su cuenta, los admitidos, de caballo, montura, vestuario y equipo. El armamento corría a cargo del Estado.
Han pasado ya 175 años desde esas primeras etapas de vigilar caminos y veredas para la protección de los viajeros. Casi dos siglos de servicio a España en la que se desarrollaron las guerras carlistas, pronunciamientos militares, las luchas en Ultramar (Cuba y Filipinas), o el devenir de períodos revolucionarios, monarquía, Restauración, II República, Guerra Civil, Estado Español y Democracia.