SISTEMA MONETARIO ROMANO
LA MONEDA ROMANA
La moneda romana pasó durante su historia por distintas etapas. Desde un inicio muy tosco con piezas fundidas hasta delicadas e insuperables muestras del arte monetario. Desde sólidas piezas de oro y plata pura hasta monedas devaluadas simplemente bañadas en plata. Desde sobrias improntas hasta recargados diseños llenos de simbología.
Aunque los griegos venían acuñando monedas de plata desde el siglo VII antes de Cristo, las primeras monedas romanas se hicieron fundiendo toscos trozos de Oricalco, una aleación de 80% cobre y 20 cinc. En los primeros, llamados generalmente AES RUDE, los lingotes no tienen ninguna diseño pero más adelante se les adornó con representaciones de animales, con frecuencia ganado (Pecus) porque, se supone, era su equivalente de valor, de donde se derivó el nombre “Pecunia” , término que en los idiomas modernos significa dinero.
Estos lingotes rectangulares con la res como tipo más común aunque hubo otros, se llamaron AES SIGNATVM. Tanto los Aes Rudos como los signatum fueron probablemente unos equivalentes para intercambio más que una verdadera moneda.
Es recién hacia el 269 a.C. que se comienzas a producir las verdaderas monedas romanas, los “Aes Grave”; unas piezas circulares, fundidas, con la imagen de Jano, el dios bifronte, patrono de las puertas y de los comienzos y finales de un lado, y una proa de galera, representando el futuro poder naval de Roma al reverso. El valor de la moneda se indicaba en el As por una barra vertical u horizontal, en el “Semis” con una S, y en los fraccionarios de acuerdo al número de uncias. En el anverso llevaba una divinidad, comenzando por Jano en el “as” como indicado
Al comienzo los Aes pesaban una Libra y estaban divididos en 12 quinarios u onzas, pero pronto a causa de los gastos de la Primera Guerra Púnica, se redujeron los Ases a dos onzas de peso.
Si bien los Aes de bronce fueron de pura inventiva romana, a partir de año 290 se comenzaron a acuñar piezas de plata de dos dracmas de valor, las Didracmas, copiadas en todo excepto en los diseños de las monedas griegas de ese valor y al iniciarse la Segunda Guerra Púnica se cambiaron las Didracmas por Quadrigatus, monedas similares pero con el retrato de Jano y la cuadriga , de donde la viene el nombre.
Anonymous AR Quadrigatuss or Didrachm. 215-213 BC, the time of the 2nd Punic War. Laureate, janiform head of the Dioscuri / Jupiter right, holding scepter & hurling thunderbolt, in a quadriga driven by Victory, ROMA below in linear frame. Syd 65i, Cr38/3.
Los Quadrigatus fueron a su vez reemplazados por los Victoriatus acuñado por primera vez en el 228 a.C. aunque hay quieres le dan como partida de nacimiento el año 205 a.C. Esta moneda lleva marcada la figura de la Victoria coronando a un estandarte. Esta moneda que al decir de Plinio tienen su origen en Iliria se acuñaba inicialmente a razón de 112 por libra aumentándose su valor posteriormente a 96 por libra.
Victoriatus
En el 187 a. C se introduce el denario definitivamente desplazando al Victoriatus. Otros autores dan el 211 o poco antes como fecha del inicio del denario. Es interesante anotar que el nombre “denario” proviene, como se vio en el caso de la palabra “Pecunia” de su relación al precio equivalente de animales. Denis asinum o 10 asnos.
EL SISTEMA DEL DENARIO
Los Denarios tenían un valor de 10 Ases hasta el año 133 a.C. en que se cambió a 16. Esto puede apreciarse en los denarios republicanos ya que antes de la fecha indicada muchos de ellos llevan la numeración romana X (ver Denario / gens Renia) en el anverso y luego de ella el XVI (ver Denario / gens Titinia) A fines del período republicano se introdujo una moneda de oro, el Aureo que valía 25 denarios.
Con la llegada del imperio se volvieron a producir piezas de bronce y cobre. Otra novedad que llegó con Julio Cesar, se continuó durante las Guerras Civiles y se consagró con Augusto, fue la representación de personajes vivos en las monedas. Esta costumbre tenida en la República como una aberración de las monarquías orientales se adoptó como forma de propaganda política.
Dibujo del denario de propaganda de Bruto. Su retrato en el anverso y en el reverso el gorro de la libertad, las dagas y el dia del asesinato de Cesar, los Idus de Marzo (EID MAR).
Marcus Antonius advertising his connection with Caesar, April 44 BC in
Marc Antony in Armenia: Armenia Devicta , y Cleopatra VII
The Battle of Actium 31 BC
Before the battle of Actium, Marcus Antonius pays his legions (32 BC),
Aunque la moneda principal fue el Denario, hubo múltiplos y submúltiplos. En oro se acuñó el Aureo que valía 25 denarios, y un medio Aureo llamado Quinario de oro de 12 ½ denarios. En plata hubo también el medio denario con el nombre de Quinario; En Oricalco el Sestercio y el Dupondio a razón de 4 y 8 por denario respectivamente y el cobre el As dividido en cuatro Quadrans.
A partir del reinado de Nerón, se inicia una inflación producida mayormente por los gastos militares y en general todos los gastos administrativos hizo que el denario se fuese devaluando y para la segunda década del siglo III, la moneda de plata pura se había convertido en una aleación con sólo 50% de plata.
Ante la necesidad de adecuar la amonedación a la realidad, el emperador Caracalla, cuyo nombre verdadero era Marco Aurelio Antonino, creó en el año 215 una moneda que fue llamada, en honor a su persona Antoniniano. Aunque la nueva moneda valía dos denarios, ya devaluados, en realidad sólo pesaba en equivalente a un denario y medio y su contenido de plata era de 40%. Medio siglo más tarde los Antoninianos eran monedas de cobre a las que se les aplicaba un Delgado baño de plata equivalente a menos de 3% del peso total.
Las monedas de cobre y bronce sufrieron una suerte similar a la del antoniniano. Fueron perdiendo de peso con el correr de los años. Finalmente los valores más pequeños desaparecieron y los mayores se redujeron hasta que su acuñación se hizo solamente esporádica.
II. MONEDAS REPUBLICANAS
La Moneda de bronce
Tras su introducción en el 335 a.C. el As Grave, conocido también como As Libral sufrió cuatro devaluaciones subsecuentes en peso y en valor, Por lo tanto es posible encontrar monedas republicanas con los mismos cuños pero con pesos diferentes. La tabla inserta a continuación (Ferri L, 1983) muestra los valores y pesos de las monedas luego de cada uno de las cuatro. Es importante saber que al momento de la primera devaluación (de As libral a As Semi libral) la unidad de referencia cambia de "Libra ligera" (272.88 g) a "Libra pesada" (327 g).
La Moneda de plata
Las monedas de plata durante la época republicana fueron:
Denario: La moneda circulante más común. Muestra en su anverso la cabeza de Roma con casco y una marca "X" (=10 Ases) o, luego de que fuera incrementada a 16 Ases una marca "XVI". En el reverso usualmente se encuentran los "dioscuri" montados a caballo o otros temas relacionados a las familias de los acuñadores y la palabra ROMA".
Quinario: Tiene los mismos diseños que los denarios pero con una marca "V" de valor (5 Ases)
Sestercio: Tiene los mismos diseños que los denarios pero con una marca de valor "IIS" (2 ½ Ases).
Victoriato: Muestra en el anverso la cabeza de Júpiter y en el reverso la Victoria coronando un trofeo (panoplia). Esta moneda fue introducida para el comercio con mercados lejanos y su valor era de tres sestercios. Habían piezas de ½ Victoriato y Doble Victoriato.
Abajo hay una tabla (Ferri L, 1983) comparando el valor y los pesos de las monedas de plata en el 286 a.C. y el 217 a.C.
Amonedación de oro
La moneda de oro no fue frecuente durante la época republicana. El tesoro prefería mantener el oro en barras o a lo más en monedas extranjeras. La primera amonedación de oro fue acuñada a finales de la República y se hizo mucho más frecuente durante el tiempo de Julio Cesar. La ley del oro en las monedas era normalmente muy alta.
Abajo hay una tabla indicando las monedas de oro principales durante la República. (Ferri L. 1983)
III. REFORMA DE AUGUSTO
El sistema monetario durante el Principado de Augusto era el que se muestra en la tabla que sigue.
La acuñación de moneda de oro y plata estaba reservada al emperador mientras que la de cobre y oricalco era de competencia del Senado y llevaba siempre la indicación S C (Senatus Consulto) que significa "Con autorización del Senado
IV.
REFORMA DE NERÓN
(63-64 D.C.)
Nerón rebaja el peso del Aureo y del Denario. El Aureo pasa de 1/42 a 1/45 de libra, es decir de 7.79 gramos a 7.27 gramos. El Denario fue disminuido de 1/84 a 1/96 de Libra equivalente a una bajada de 3.89 a 3.41 gramos. Nerón reduce la ley del Denario a una pureza de 90 %.
V.
REFORMA DE CARACALLA
(215 D.C.)
El peso del Aureo fue reducido a 1/50 de Libra, es decir a 6.54 gramos. También se ordena la acuñación, aunque en cantidades muy reducidas del Doble Aureo llamado “Binión”. La gran novedad en esta reforma fue la introducción del Antoniniano. En nombre de la nueva moneda deriva del nombre del emperador Marco Aurelio Antonino, que era llamado Caracala en referencia auna túnica de estilo galo, llamada asi, que acostumbraba usar.
El Antoniniano estaba hecho de una liga de plata del 20% y cobre al 80% y pesaba 5.45 gramos. Su diámetro de 22 a 24 mm era mayor que el del denario cuyo diámetro fluctuaba entre los 18 y 19 mm. El antoniniano se distingue porque en él se presenta al emperador con corona radiada, representando al sol, y los bustos de las figuras femeninas sobre una luna creciente.
En cuanto al valor de la nueva moneda existen diferentes teorías. Mommsen estima que debe tratarse de un doble denario mientras que Hultsch piensa que representa un Denario y medio. Parece más fundada la teoría de Ulrich-Bansa quien sostiene que debe tratarse de un medio Denario. De hecho el Antoniniano convivía con el Denario en tiempos de Caracala, pero algunos de sus sucesores acuñaron más Denarios que Antoninianos. Alejandro Severo y Máximo sólo acuñaron Denarios, y la gran producción de Antoninianos sólo se inicia en tiempos de Gordiano III. Si el Antoniniano hubiese tenido un valor nominal superior al Denario con un valor intrínseco inferior, ciertamente el Denario hubiese desaparecido del mercado de acuerdo a la conocida ley de Gresham.
VI.
REFORMA DE AURELIANO
(272-275 D.C.)
Después de la reforma de Caracala las monedas continuaron a sufrir algunas variaciones e peso mientras el Antoniniano disminuía en su contenido de plata. Durante el reinado de Trajano Decio se acuñó un Doble Sestercio. Esta moneda se acuñó en oricalco con un peso de 40.9 gramos y lleva la cabeza radiada del emperador.
El Antoniniano se redujo a 3.89 gramos (1/84 de Libra) , e incluso el Denario sufrió una reducción de peso. Aureliano promueve una reforma de amplia base. Reestructura la Ceca, mejora la calidad de la moneda, le coloca al Antoniniano la marca “XXI” de valor, y estabiliza la relación de pesos entre las monedas. La tabla inserta a continuación (Ferri L, 1983) muestra los nuevos pesos.
VII.
REFORMA DE DIOCLECIANO
(295-296 D.C.)
Los detalles de la reforma monetaria de Diocleciano tanto en los detalles como en la fecha, son oscuros. Se entiende que se trató de medidas sucesivas que se extendieron a lo largo de una década.
1. Oro: Los primeros pasos de ls reformas se dieron con la creación de una moneda de oro, el Aureo, creado en el 286 con una talla de 60 piezas por libra lo que significaba que las monedas tenían un aumento de 12 granos sobre sus similares anteriores que eran de 70 piezas por libra.
2. Plata: Diocleciano introdujo una moneda de plata similar en ley y peso a los denarios de Nerón. Esta moneda probablemente se llamó “Argenteus” y significó un paso importantísimo en la restauración del sistema monetario romano ya que el imperio no había acuñado monedas de plata desde el gobierno compartido de Valeriano y Galieno.
3. Bronce: Entre los años 295 y 296 se instituyó una moneda de bronce, el “Follis” que se parecía en tamaño y peso a los “Ases” del inicio del Imperio y que generalmente era bañado en plata. Se continuó acuñando piezas similares a los Antoninianos pero sin nada de plata, contra el 4% de ese metal que tenían estos. La desaparición de la inscripción XXI en el exergo de los Antoninianos y su inclusión en la nueva moneda, el “Follis”, parece confirmar la teoría de que ésta fue puesta en las monedas por Aureliano para indicar que tenía 20 partes de cobre y 1 de plata.
Otra importante novedad que se da con la reforma de Diocleciano es que a partir de ese momento las marcas de ceca aparecen regularmente en las monedas
VIII.
REFORMA DE CONSTANTINO
(310 D.C.)
Durante el reinado de Constantino la moneda sufrió una serie de cambios en los tres metales.
Cuando Constantino era aún Cesar, procedió a reducir el peso de los Follis en las cecas bajo su control (Londres, Lugdunum, Tréveri).
Realizó una segunda reducción en marzo del 307 cuando fue proclamado Augusto. Poco después realizó una tercera reducción, dejando al Follis en aproximadamente 68 granos.
Estas reducciones mencionadas arriba fueron sólo para mantenerse a la par con lo que se estaba haciendo en el resto del Imperio, pero fue en el año 312 cuando realmente procedió a hacer reformas nacidas de su propia iniciativa.
ORO:
En reemplazo del Aureo (60 x Lb de oro) introdujo el Sólido (72 x Lb de oro). El Sólido tenía como fraccionario al Semis = ½ Sólido (aprox. 2.27 gramos) y el 1 ½ Scrupulum de aproximadamente 1.70 gramos.
Los Aureos se siguieron acuñando en la parte oriental del Imperio hasta la derrota de Licinio. A partir de ese momento el Sólido se convirtió en la única moneda de oro Imperial.
PLATA:
La Siliqua fue una moneda de plata introducida por Constantino que tenía una equivalencia de 24 por un Sólido. Aunque con nuevo nombre, la Siliqua parece haber sido igual al Argenteo de Diocleciano cuya talla era de 96 por libra.
También introdujo el Miliarense moneda de plata de 72 piezas por libra. Una Siliqua equivalía a ¾ de un Miliarense y este último equivalía a 1/18 de Sólido.
1 Sólido = 2 Sémises = 18 Miliarenses = 24 Siliquas.
COBRE:
Luego de la derrota de Maximiano en el 312, Constantino y Licinio reemplazaron el Follis por una moneda de cobre de 18 a 20 mm de diámetro y 48 granos de peso conocida en la numismática como AE 3. Esta moneda sobrevivió hasta la introducción de del tipo "Gloria Exercitus" en el 330 pero fue pronto reducida a 17mm de diámetro y 30 granos. Unos años después, probablemente en el 336, se hizo una nueva reducción a la moneda de cobre dejándola en unos 20 a 25 granos. Las monedas de cobre durante los últimos 7 años de la vida de Constantino frecuentemente se reducen a menos de 17 mm de diámetro.
LAS CECAS
La moneda romana se acuñó normalmente en la ciudad de Roma, pero algunas veces se usaron cecas de otras ciudades de Italia o de otras provincias.
Durante la época republicana no se prohibía a las provincias su derecho a acuñar su moneda propia. Este derecho se mantuvo por un tiempo relativaamente largo aunque mientras que en algunos casos las provincias podían seguir con su propia moneda, en otros tenían que acuñar con el retrato del emperador o algún miembro de su familia. La plata y el oro eran sólo acuñadas en las cecas más importantes.
Cuando toda Italia recibió la ciudadanía y el derecho romano, la moneda romana se convirtió en la de toda la península y en consecuencia los otros pueblos perdieron el derecho a acuñar la propia.
Probablemente cuando los romanos comenzaron a acuñar monedas de plata fue cuando se crearon los oficios (llamados triunviri montéales) encargados de supervisar la acuñación. Estos oficiales colocaban su nombre o alguna inscripción que los identificaba y que variaba dependiendo del lugar y el momento, en las monedas de oro y plata.
Desde los tiempos de Augusto los "triumviri montéales" dejaron de colocar sus marcas en las monedas porque la acuñación de oro y plata se convirtió en un privilegio del emperador. El Senado conservó solamente el derecho de acuñar cobre, por lo que casi todas las monedas de cobre de ese período llevan la inscripción "S. C." (Senatus Consulto) o "Ex S. C." (Ex Senatus Consulto).
En tiempos del emperador Gallieno la acuñación de moneda en todos los metales se convirtió en privilegio exclusivo del emperador pero, a causa de la enorme extensión del imperio se tuvieron que emplear más de una ceca en algunas de las provincias como la Galia por ejemplo. En las cecas lejanas la amonedación se hacia abajo la supervisión de los "Questores" o los "Procónsules". Así, todas las colonias y provincias romanas pasaron a tener una moneda unificada.
En la parte occidental del imperio este cambió se produjo en el primer siglo de la era cristiana, pero en el oriente la práctica de una moneda unificada se generalizó después del gobierno de Gallieno.
Durante el reinado de Aureliano un buen número de ciudades del imperio tenían ceca propia donde acuñaban monedas romanas y cuyos superintendentes eran llamados "Procuradores" o "Prevostes monetarios".
Fuente: UNED
Historia Antigua
Ana María Vázquez Hoys
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